
¿Cuántas veces nos hemos puesto a ordenar la cocina y nos hemos dado cuenta de que tenemos un montón de cacharros? Pues ahora con
Thermomix® y TM5 podemos guardar ralladores, pasapurés o molinillos en el fondo de un mueble y no usarlos jamás, porque todos estos aparatos están integrados en nuestro
Thermomix® .Dependiendo de los ingredientes que queramos transformar, usaremos una velocidad u otra de nuestro
Thermomix® y TM5, ya que no se requiere la misma fuerza para
rallar queso que para
moler pan, legumbres o
pulverizar azúcar.


Por ejemplo, el
azúcar es uno de los ingredientes más duros que existen, así que para convertirla en
azúcar glass la pondremos en el vaso del
Thermomix® y usaremos la
velocidad 10 hasta que veamos que sale polvo blanco a través del bocal. Es importante que el vaso del
Thermomix® y del TM5 esté muy seco a la hora de pulverizar azúcar y también harinas, por lo que tendremos que realizar un “
centrifugado” antes de añadir el ingrediente.El “
centrifugado” no es más que poner el
vaso vacío del
Thermomix® y TM5 y programarle
20 segundos a
velocidad 10. De esta manera los restos de agua acabarán en las paredes del vaso y podremos secar con un trapo de cocina o con papel absorbente. Este mismo resultado se obtiene pulsando varias veces el botón
Turbo de
Thermomix® o programando
2 segundos en
velocidad Turbo en el
nuevo modelo TM5.Para obtener un resultado homogéneo a la hora de rallar, moler o pulverizar en
Thermomix® y TM5, es importante no llenar el vaso más de la mitad de su capacidad. Además de azúcar se pueden transformar otros muchos ingredientes como chocolate, frutos secos, hierbas aromáticas, etc. Si se quiere
rallar queso parmesano o
pan duro sólo hay que poner el ingrediente en trozos dentro del vaso del
Thermomix® o TM5 y programar
10 segundos a
velocidades progresivas entre 5 y 10. Si se tratase de un
queso más
blando se pondría de la misma forma pero usando sólo la
velocidad 5.

A la hora de
pulverizar pieles de cítricos que servirán luego como aromatizantes naturales, debemos tener en cuenta que si no se trata de cantidades grandes, es mejor si ponemos el
vaso vacío de
Thermomix® y Tm5, programamos a
velocidad 10 y una vez en marcha añadimos las
pieles por el bocal. De esta manera sólo necesitamos unos segundos de pulverización y además evitamos que se dispersen y queden pegadas a las paredes del vaso o la tapa.

Si queremos elaborar
harinas caseras, algo muy útil para personas con intolerancias y alergias, podemos hacerlo usando esta función de nuestro
Thermomix® y TM5, ya que sólo tenemos que poner
medio kilo del ingrediente en el vaso (garbanzos, maíz, arroz, etc.) y pulverizar durante
2 ó 3 minutos a
velocidad 10. Para que estas harinas se puedan agregar a otras recetas tendremos que
cocinarlas durante
30 minutos en el
Thermomix® o TM5, a
temperatura Varoma y
velocidad 3,
quitando el cubilete para evitar la humedad. De esta forma deshidratamos la harina. Por último la dejaremos
enfriar dentro del vaso y la volveremos a
pulverizar.